7.2.07

Satyagraha

De qué modo todo cambia, todo se tergiversa, todo se convierte en un calcetín que se da la vuelta en función del propio punto de vista (o de ceguera).

El término sánscrito Satyagraha significa algo así como "lucha por la verdad". Pero en el ideario de Gandhi, que fue quien lo popularizó, implica más cosas. Supone la lucha por algo justo, aún a costa de grandes sufrimientos personales. Y sobre todo, implica el deseo de cambiar al oponente mediante la fuerza del amor y de la verdad. Lleva aparejado de modo indisoluble la ahimsa, significando la no-violencia física y mental.


Gandhi ayunaba para cambiar lo que había a su alrededor, para ejercer presión sobre sus oponentes o sus partidarios, era un ayuno apoyado en la propia espiritualidad que pretendía cambiar el corazón de los otros, a los que siempre consideraba dignos de respeto, por más que adoptasen posturas contrarias a la suya. La ahimsa no se limita a ejercer una resistencia pasiva, pretende subvertir las ideas del otro hasta cambiarle en lo íntimo.

Las huelgas de hambre son un modo de llamar la atención a la sociedad, haciendo que se fije en un estado de injusticia irresoluble por otros medios. Implican el deseo de derribar una ley o una situación de abuso, pero no conllevan ninguna idea de mejora personal, ni en uno mismo ni en el otro. Son una medida de presión para que ese otro acepte ciertas exigencias, pero no pretenden cambiar su corazón.

Casi siempe el ayuno y la huelga de hambre son respetables, por lo que tienen de renuncia y de disposición al sacrificio personal. Casi.

Cuando un asesino reconocido y jactancioso decide denunciar una situación personal que considera injusta, duele ver que precisamente manipula un arma -en sus manos lo es, sin duda- que los no violentos crearon y usaron para el interés común.

Supongo que Gandhi, Lanza del Vasto, Luther King se remueven en sus muertes y le esperan, deseosos de explicarle un par de cosas.

5 comentarios:

Arcángel Mirón dijo...

Hay que tener pelotas para arriesgar la propia vida para cambiar algo que toca a todos.
Como las huelgas de hambre son reconocidas como algo noble y valiente, muchos que de noble y valiente no tienen nada deciden no comer para cambiar algo que los favorece sólo a ellos.

Ahora, estas personas (los innobles, claro está) deberían pensar que tal vez a ellos SI los dejen morir, porque su causa no importa a nadie.

Paula dijo...

estoy completamente con vosotros

y creo, sólo en algunos momentos, que quizá algo en sus conciencias, algo todavía sano, se retuerce, y les está castigando por eso...

Pero sólo divago

Sebastián Puig dijo...

De todos los análisis que he podido leer sobre el asunto De Juana, sin duda me quedo con el tuyo, Neo, por sensato, brillante y lúcido. Te felicito.

Ruth dijo...

De acuerdo con todos. Nunca había analizado el asunto desde este punto de vista.
Un placer encontrarte.

Portarosa dijo...

De acuerdo yo también.

Un saludo.