6.3.09

Ensayo sobre la ceguera

Leo y veo que han rodado una peli basada en uno de mis libros favoritos de Saramago. Me gusta el director y me gustan los actores, pero no se, no sé. A ciegas. Tampoco me gusta el nombre, pero ya veremos. (¡Huy!)

También leo que en Barcelona vive una iraní a la que un idiota despechado dejó ciega. Desfigurada, necesita ayuda para casi todo, y vive de una pequeña pensión en un piso compartido. Tiene miedo de volver a su país, pero según parece lo hará para celebrar su triunfo: ha conseguido que la justicia (?) de su país condene a su agresor a ser cegado del modo en que lo fue ella. Y si ella no puede hacerlo, alguien que la quiere lo hará por ella.



Ojo por ojo, y el mundo acabará ciego, dijo un hombre miope y enclenque.

Y si no queda ciego, ensuciará con su mirada (una y otra vez) cualquier idea, cualquier recuerdo. Tomará las escasas pertenencias de un pobre y las venderá por millones de euros. De igual modo, tomará cualquier idea y la llevará a su contrario. Donde exista algún rastro de pureza, será prostituido.

Pasen, y vean.

6 comentarios:

Toy folloso dijo...

También creo que el ojo por ojo es un camino que no lleva a ningún lugar.
Claro que no me han dejado la cara como a la pobre mujer....

Arcángel Mirón dijo...

"Da una señal de vida y ahí estarán matándote", escribió un poeta que me encanta, Gustavo Nápoli.

Qué mierda es todo. Bah, no todo. Pero hay mucha mierda.

pau dijo...

Ojo por ojo...
La iraní sabe que ha triunfado, quizá no por el especial castigo que propinarán al hombre que provocó su ceguera, sino porque la justicia va a cumplirse, lo que es difícil.
Cada tierra tiene sus leyes y hay que respetarlas. Los iraníes creen en el ojo por ojo y lo practican, más o menos como algunos estados norteamericanos, su justicia así lo dicta. Después de todo esta ley nació allí, en el Tigris y el Éufrates.

SEISITO dijo...

Hola permiso, me llamó la atencion el tema, te cuento, a mi esposo un medico inescrupuloso lo dejó ciego de un ojo y como mi esposo es muy arrebatado estuvo a un pelo de pegarle cuando se enteró de todo lo que este medico no le advirtió a tiempo porque habria salvado su ojo,ahi habria sido un OJO POR OJO,jajaja pero hay que estar en el lugar del otro para saberlo ¿o no?
bueno un saludo
Antonia de antofagasta chile

SEISITO dijo...

Perdon, te iba a comentar sobre lo leido, terrible lo que le paso a esa pobre chica iraní, y terrible las medidas que toman para hacer justicia, pero creo que es muy ejemplificador para otros que piensen hacer algo igual.
Es duro pero efectivo y que Dios me perdone jajaja.
cariños

Calamidad dijo...

NeoGurb, dices de mí, pero tú también hace el huevo que no actualizas, ¿eh?

¿Qué sería de la sentencia? ¿Se cumpliría? ¿Sí? ¿No? Si mi memoria no me falla, creo que el modo en el cual iban a dejar ciego a este, en fin, a este ser era mediante una anestesia local, poniéndole unas gotillas de ácido sulfúrico (el mismo que él uso para desfigurar a su entonces novia) en cada ojo.

Arg, el sólo hecho de pensarlo me produce una arcada que viene desde el estómago mismo. No desde la garganta.

Y no sé qué decirte, pues. No me produce lástima aquel agresor. Más bien me da pena. Pero pena por ser un ser que, pese a que le hayan dejado o no ciego, no será capaz de cambiar su esquema de vida. Seguirá pensando, casi con toda seguridad, que si volviera a tener que hacerlo, lo haría. Total, ¡él ya está ciego! (bueno, no voy a frivolizar con el tema).

Con Pau estoy de acuerdo. Pero puntualicemos. Si las leyes son injustas, ¿no sería bueno cambiarlas? Obviamente también estoy con Gandhi. Pero, hum, ¿quién dictamina lo que es bueno y lo que es malo? ¿Acaso no es la ablación para un africano algo bueno mientras que a nosotros nos produce estupor? Leí un ensayo hace tiempo sobre el condicionamiento sociológico de las poblaciones. Muy bueno, por cierto. Hablaban sobre Hamlet... A ver si lo encuentro que me marcho pasado mañana a la casa de mis pás y allí estará. Mientras tanto, voy a tender la colada. Tribulaciones de una ama de casa a la fuerza. ;-D

Bueno, ya. Decídase usted a escribir de nuevo, que nos tiene abandonados, coño.

Besotes.
Cal